El brote de coronavirus tiene en alerta a todo el mundo, pero en China, país en el que se comenzó a propagar el virus, los habitantes implementan un extraño método para no contagiarse.
Las redes sociales fueron las primeras en hacer eco de esta particular técnica: utilizan bidones de agua en la cabeza. Este extraño método nace en medio de la escasez de barbijos y el pánico a contraer esta enfermedad que hasta ahora ha causado la muerte de más de un centenar de personas.



Estas imágenes, de gente con botellones de plástico cubriéndose el rostro, no solo se vieron en las zonas aledañas a Wuhan, donde se originó el coronavirus, sino que además se replicaron por todo el país asiático.
Ante la recomendación de no salir de sus hogares, y en caso de ser muy necesario hacerlo con métodos preventivos, se pueden observar por las calles a miles de chinos caminando, en el subte y en diferentes acciones cotidianas con un bidón de agua en la cabeza.



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Usan extraños métodos por pánico
El pánico por contraer coronavirus se incrementa de tal modo que alrededor de Wuhan se construyeron muros con la finalidad de que quedé aislada. Además cortaron las rutas y caminos para que nadie pueda entrar o salir.
Por otro lado, la demanda de mecanismos de protección contra este padecimiento, derivó en este extraño método. En ese caso, China fabricará 180 millones de barbijos por día.
Otro extraño método se vio dentro de un avión, cuando un pasajero se puso un casco de moto durante un vuelo desde China a Australia, con el objetivo de evitar el contagio.



El sujeto fue visto en el vuelo Shanghai a Perth, de 9 horas de duración, usando un casco como protección; esto captó la atención de los demás pasajeros, que debieron esperar que el personal a bordo rocearan desinfectante por toda la aeronave para poder despegar.
“Estaba en la previa del vuelo a Shanghai y juro por Dios que no vi a nadie sin una máscara, aunque algunas llamaron mucho la atención”, dijo Marina Jambrina al medio “The West Australian”.
En medio del caos, las personas se valen de distintos y extraños métodos caseros para cubrirse, a fin de no contagiarse.