Fernández reiteró que el proyecto de legalización del aborto podría convertirse en ley

legalizacion del aborto

Este jueves 19 de noviembre, el presidente Alberto Fernández reiteró que con el proyecto enviado al Congreso sobre legalización del aborto no se está haciendo obligatoria esa práctica sino que se busca “garantizar la vida de la mujer que enfrenta un embarazo”.

Al mismo tiempo, se manifestó confiado en que en esta oportunidad la iniciativa será sancionada por el Congreso.

“Creo que estamos en condiciones de que esta vez el aborto se convierta en ley”, dijo el presidente argentino en declaraciones a la radio online FutuRöck. “Esta vez no habrá un presidente llamando a un gobernador para que sus senadores voten en contra” añadió.

Lea también Diputados buscará aprobar proyecto de aporte único de las grandes fortunas

Avanzando para una aprobación

Asimismo, Fernández resaltó que la llegada de la pandemia al país, el pasado 19 de marzo, atrasó los tiempos para enviar el proyecto de legalización del aborto.

“Aun cuando es cierto que los abortos se producen por vía farmacológica, yo lo que busqué es que afloje un poco la tensión sanitaria, y que si una mujer necesita el sistema sanitario no tenga que estar bajo el estrés de una pandemia”, agregó el mandatario.

Sobre las posibilidades de que se apruebe la iniciativa esta vez, y al comparar la situación actual con el proyecto de legalización del aborto rechazado por el Parlamento en 2018, Fernández indicó: “Yo entiendo que estamos en condiciones de que esto se convierta en ley“.

“La diferencia con otros tiempos es que más allá de la enorme lucha del movimiento feminista por esto, yo la verdad me siento el primer abanderado de este reclamo”, sostuvo. “No es un presidente que cumplió mandando una ley para que no digan que no cumplió. Es un presidente que activamente se ocupa para que salga, y yo haré todos los esfuerzos para que este proyecto se convierta en ley”.

Proyecto de legalización del aborto

Por otro lado, el presidente rechazó los episodios de violencia contra algunas militantes feministas de las últimas semanas, e insistió en que “no se trata de aborto sí o aborto no, porque los abortos siguen ocurriendo”.

“Aquí lo que discutimos es si los abortos se hacen en clandestinidad, con todo el riesgo que ello implica, o podemos hacer abortos en los hospitales públicos y dándoles las condiciones sanitarias a las mujeres que los piden”, argumentó el mandatario.

En ese sentido, aseveró que “no estamos haciendo obligatorio el aborto“; y remarcó que junto con el proyecto de legalización de la interrupción del embarazo el Gobierno envió al Congreso el proyecto conocido como “Plan de los 1000 Días”, que implica una asistencia integral a la mujer durante el embarazo y la primera infancia de su hijo.

“Por eso mandé las dos leyes juntas, para terminar con la hipocresía. La mujer que quiere seguir adelante con el embarazo, bienvenida sea, y tendrá el hospital público para atenderse; y la que decida interrumpirlo, que sepa que no pondrá en riesgo su salud y su vida”, aseveró.