El destituido presidente de Perú, Martín Vizcarra, admitió que le dolió su salida de la jefatura del Estado, ya que no esperaba que el Congreso tomara esa decisión y quería seguir en el cargo “hasta donde establecía la Constitución”, el 28 de julio de 2021.
“Obviamente me duele, como a todos los peruanos”, admitió Vizcarra ante periodistas que lo esperaron fuera de su domicilio, la noche de este lunes 9 de noviembre, en el distrito residencial limeño de San Isidro.
Tras dejar el Palacio de Gobierno, el ahora exmandatario arribó a su casa hacia la medianoche de este lunes en un vehículo escoltado por policías y fue recibido por decenas de personas, en su mayoría vecinos de su barrio, quienes lo vitorearon y le pidieron que “luche” por mantenerse en el cargo.
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Decisión del Congreso
Martín Vizcarra también admitió que aunque se sorprendió con la decisión del Congreso “porque finalmente los parlamentarios son representantes del pueblo y ellos tienen que votar en función de lo que el pueblo dice”, la aceptó, pese a que su gestión contaba con gran apoyo popular.
Además, reiteró que no piensa postularse a las elecciones presidenciales de abril del 2021 porque ya ejerció la jefatura del Estado durante este período; además, Vizcarra destacó que planea regresar a su actividad profesional como ingeniero.
“No puede decirse que no hallamos puesto alma, corazón y vida para mejorar las cosas”, acotó Vizcarra sobre su gestión antes de responder con un “por supuesto” a la consulta de si se pondrá a disposición de las investigaciones que se le siguen por presuntos actos de corrupción, que él niega de manera tajante.
Destitución de Martín Vizcarra
Este lunes, el Congreso de Perú destituyó a Martín Vizcarra, con 105 votos a favor, tras debatir la llamada “moción de vacancia” impulsada contra el mandatario por las acusaciones de que cometió actos de corrupción cuando ejerció como gobernador de la provincia sureña de Moquegua (2011-2014).
La resolución parlamentaria declaró la “permanente incapacidad moral del presidente”, por lo que se aplicó “el régimen de sucesión establecido en la Constitución”.
Debido a que Vizcarra no tiene vicepresidente, ahora la presidencia de Perú recaerá en Manuel Merino, el presidente del Congreso e integrante del grupo político centro derechista Acción Popular (AP), quien se juramentó la mañana de este martes.
