El arte de ser sommelier conlleva una profunda preparación que abarca conocimientos de enología, maridajes, comunicación, e incluso geografía.
Esto se debe a que el sommelier no solo debe ser alguien que sepa de vinos, sino que también alguien que sepa cómo comunicar sobre ellos.
Dentro de la carrera de sommelier, aprender sobre climas, suelos, maridajes, comunicación y ventas es igual de importante que aprender sobre los propios vinos.
Sin embargo, claro está, un buen profesional de la sommellerie debe ser capaz de catar todo tipo de vinos, pudiendo reconocer sus características principales a partir de su aspecto, su aroma y su gusto.
Debe estar al tanto de las propiedades y características de todos los tipos de vino existentes, de cada bodega y de cada territorio.
Esto conlleva un gran trabajo y deja en evidencia que, a diferencia de lo que se suele pensar, el trabajo del sommelier demanda una constante capacitación e investigación.
Y es que no hay que olvidar que para ser un verdadero sommelier es necesario contar con un título habilitante.
Por suerte, hay muchas maneras de obtenerlo. Muchas academias digitales, como Formate Sommelier, ya han desembarcado en Brasil para ofrecer cursos completos y de la más alta calidad.
¿En qué consiste el trabajo de un sommelier?
Como ya se ha adelantado, el sommelier es más que un catador: es un comunicador. Por lo tanto, gracias a su formación, puede desempeñar diversos roles dentro de la industria vitivinícola.
Puede trabajar en bodegas y vinotecas, gracias a sus conocimientos sobre suelos y climas.
También puede dedicarse al turismo, trabajando en alguno de los muchos planes de enoturismo que existen en diversos países del mundo.
En muchos casos, los sommeliers también son contratados de forma independiente para dar alguna demostración, hacer catas en vivo o dar charlas y capacitaciones.
Dentro del rubro de la comunicación, el trabajo de un sommelier puede ser sumamente valioso para diversos medios de comunicación especializados en el tema.
Como ya se ha dicho, su principal función es la de comunicar sobre el vino de forma clara y eficiente. Y no hay mejor forma de hacerlo que por esos canales, así como también por redes sociales, portales web e, incluso, haciendo guías virtuales a bodegas y viñedos.
El sommelier es un complemento fundamental para la experiencia que encierra el vino.
Debe acompañar la venta del mismo, desde que llega a la tienda hasta que es ingerido. Sus comentarios, sus aportes y sus sugerencias de maridaje son elementos esenciales para garantizar que los comensales puedan sacarle el máximo partido a su bebida.
Como se verá, el trabajo del sommelier va mucho más allá que el de un simple catador, y se acerca más a lo que se conoce como un enólogo. Podría denominarse, quizás, como el punto medio entre ambos.
Por eso, si sos un o una entusiasta del mundo del vino y te gustaría adquirir conocimientos de sommellerie, te invitamos a inscribirte en algún curso online sobre el tema.
Formate Sommelier, a la que ya hicimos referencia antes, es una gran opción. Todos sus cursos están traducidos al portugués, y cuenta con tours inmersivos en 360, modalidad asincrónica y hasta dos meses para tomar las clases a tu ritmo.
¿Conocías todas las responsabilidades que tiene un sommelier? ¿Alguna vez has asistido a una cata de vinos? ¡Compartinos tu experiencia en los comentarios!
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