Siria.– Los rebeldes enfrentados al régimen del mandatario sirio, Bashar Al Assad, y al Estado Islámico (EI), ocuparon este sábado la Academia de Armamento en la ciudad de Aleppo.
Los insurgentes rompieron el cerco del Ejército impuesto por el presidente sirio en las zonas rebeldes al norte de la ciudad. Esto último fue manifestado por la coalición de la oposición, asentada en el extranjero, a través de un tweet, y por Ahrar al Sham, uno de los principales grupos islámicos implicado en los enfrentamientos.
El frente ‘Fateh al Sham’ o ‘Frente de la Conquista’, antes conocido como Frente al Nosra; el cual anuló su vínculo con el conocido grupo Al Qaeda, promovió una ofensiva para romper el aislamiento impuesto desde julio. Los grupos opositores buscan abrir camino desde el suroeste de la ciudad de Aleppo a través del barrio Al Ramuza, y de esta forma liberar una nueva forma de acceso. El director del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman, sostuvo que si los rebeldes logran captar dicho barrio aledaño a las academias militares, éstos podrán conectarse con otro sector rebelde, el Sheij Said, y quebrar el cerco instalado en las zonas insurgentes.
Aleppo es la segunda ciudad más importante en el territorio sirio, y se encuentra dividida desde 2012 entre el dominio de la región este por parte de los rebeldes, y la del régimen oficialista hacia el oeste.
El jefe del Frente de la Conquista, Abu Mohammad al Jolani, había expuesto ese viernes en un mensaje de audio publicado en páginas web yihadistas, “Dios dará una victoria gloriosa a nuestros combatientes, que romperán el sitio de Aleppo”. Garantizó que “el resultado de la batalla irá más allá del levantamiento del asedio” y que “cambiará el equilibrio de fuerzas y preparará un nuevo capítulo en la guerra”.
Por su parte, Rahman también aseguró que el conflicto se dio en la zona que enlaza a la Academia de Armamento, invadida por los rebeldes, con el barrio de Sadkub, en donde se encontraban grupos oficialistas. Todavía no es seguro circular la zona ya que persiste el conflicto. Según indicó en su cuenta de Twitter la Coalición Nacional Siria, opositora al gobierno, en el combate han muerto decenas de soldados gubernamentales y luchadores del grupo chiita libanés ‘Hizbulá’, adherido también al escuadrón oficial.
La OSDH y la televisión estatal revelaron que la fuerza aérea siria, apoyada por Rusia, bombardeó emplazamientos rebeldes y rutas orientadas a Aleppo, para eludir la llegada de apoyo opositor. Rahman advirtió que “las fuerzas del régimen se encuentran en una posición muy complicada pese al apoyo aéreo ruso”.
En el noreste de Aleppo, dentro de la provincia que lleva también ese nombre, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) dominaron este sábado el feudo del Estado Islámico, la localidad de Manbij, tras más de dos meses de ataques contra este sitio. Los yihadistas hicieron explotar autos bombas, y hubieron atacantes suicidas que ingresaron en un complejo de escuelas militares, al que rodearon, según informó el periódico Al-Masdar News, a favor del régimen.
Las FDS llevaron a cabo un procedimiento para controlar Manbij, ciudad que el EI utiliza para hacer llegar provisiones desde la frontera con Turquía hacia Raqqa, ciudad ubicada en el este. El OSDH sostiene que las FDS vigilan la ciudad en busca de los yihadistas que quedan. El 23 de junio pudieron entrar en pueblos y alrededores de Manbij gracias a los bombardeos aéreos provenientes de la alianza internacional, al mando de Estados Unidos. Desde entonces fueron avanzando paulatinamente haciendo frente a los distintos contra ataques yihadistas.
La guerra interna en Siria empezó en 2011 cuando en Damasco, capital del país, tuvo lugar la represión hacia una sublevación popular que reclamaba reformas. Desde ese momento han muertos más de 280 mil personas, y millones de habitantes sirios fueron forzados a dejar sus hogares. Si bien las Fuerzas Democráticas de Siria (SDF, por su siglas en ingles), integradas por la milicia kurda YPG y por combatientes árabes, lanzó ataques hace dos meses contando con el respaldo de las fuerzas estadounidenses para desterrar al EI del último trecho de la frontera sirio – turca, la guerra persiste, aunque esta zona se encuentre casi libre de estas fuerzas yihadistas.