La firma Defense Distributed, a partir de 1 de agosto tendrá permiso para publicar planos, dibujos, instrucciones y archivos para que los usuarios puedan imprimir armas en 3D en EE.UU. Esto se divulgó a través de numerosos medios e incluso en su página web, defdist.org. Allí difundieron un nuevo mensaje: “La era del arma descargable comienza formalmente”.
Sin embargo, un juez federal impidió que la organización hiciera su lanzamiento y bloqueó la impresión de pistolas 3D en EE.UU. En el fallo, el juez Robert S. Lasnik señaló que no era una decisión acertada y que el acuerdo entre la organización y el presidente Trump era un simple capricho.
Según el juez federal, el hecho de que los ciudadanos pudiesen descargar de forma legal imprimibles en 3D tiene la probabilidad de causar un daño irreparable. Las últimas horas han sido decisivas para detener este acuerdo entre Defense Distributed y el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Hasta el momento ocho estados y Washington D.C. presentaron una demanda colectiva contra el gobierno de Trump. La demanda tenía por objetivo “bloquear la acción de la administración Trump que da acceso a delincuentes y terroristas a armas impresas en 3D, imposibles de rastrear e indetectables”.
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“Sería muy peligroso” imprimir armas en 3D en EE.UU.
Asimismo, el demócrata Bob Ferguson explicó que este tipo de armas no están registradas y son muy difíciles de rastrear e incluso de detectar, ya que son capaces de pasar los detectores de metales al estar hechas de plástico. “Sería muy peligroso”. No obstante, la organización de Propietarios de Armas en Estados Unidos no está a favor del dictamen del fiscal y manifestó que el hecho de poder imprimir estos planos de armas significa “libertad y estar acorde con la Segunda Enmienda de la constitución estadounidense”.
De hecho, los manuales ya se habrían publicado cuatro días antes del lanzamiento oficial planos de armas para imprimir en 3D. Estos se descargaron “miles de veces” y los planos de nueve tipos de armas podrían estar en manos de cualquiera. La batalla por parte de Defense Distributed comenzó en el año 2012, si bien no fue hasta 2013 cuando nació la primera pistola fabricada en 3D.
Posteriormente, en el año 2015, el presidente Obama exigió a esta organización a eliminar todos los manuales e instrucciones que estaban en internet para la impresión de armas en 3D. Hoy, la administración de Trump pactó con la organización Defense Distributed la comercialización de impresiones por internet por un concepto de 40.000 dólares en cuestión de honorarios legales y reembolsos.
