La Unión Europea señala que los derechos de los pueblos originarios se han vuelto un ciclo de luces y sombras.
A pesar del firme posicionamiento de esta diplomacia europea, con respecto a los derechos humanos de los nativos alrededor de América Latina, aún hay personas que dudan de la coherencia de esta postura.
En días pasados, Federica Mogherini, representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, reafirmó públicamente el compromiso que tiene el órgano europeo con los derechos humanos de los pueblos ancestrales en Latinoamérica.
“Siguen produciéndose violaciones de derechos humanos, como asesinatos y abusos contra defensores de los derechos humanos en varios países”, afirmó Mogherini ante estos hechos ocurridos a lo largo de los últimos años.
El pasado viernes, la Organización de Estados Americanos (OEA) reconoció que las leyes actuales amparan todos los derechos de estos pobladores que ocupan el 10% de la población a nivel mundial, aunque la realidad al aplicarse es completamente diferente.
La Unión Europea se ha mantenido siempre activa en cuanto a esta defensa y más aún después del caso de Berta Cáceres, una activista ambiental y dirigente nativa que fue asesinada el pasado mes de marzo en Honduras, pero la lista de crímenes y agresiones de este tipo se mantiene latente y va en ascenso.
Por lo que la diplomática se pregunta si ciertamente la Unión Europea está haciendo todo lo que está en sus manos y de lo que puede disponer para salvaguardar la vida de las personas que conviven dentro de estos pueblos indígenas.
Algunas instituciones comunitarias señalan que actualmente mantienen un compromiso con los pueblos nativos desde hace algún tiempo, aunque destacan que el mayor compromiso se ha venido destacando desde hace un año y medio a la fecha, todo esto con la colaboración de la Unión Europea que ha establecido gran cantidad de proyectos a favor.
Expertos en el tema señalan que la UE, en conjunto con sus estados miembros, debe fortalecer la coherencia de sus proyectos para poder ofrecer respuestas rápidas y oportunas a estos ciudadanos que se encuentran tan carentes de derechos humanos a nivel mundial.