Google construyó como nadie un proyecto de trabajo atractivo con el que convoca a profesionales de todo el mundo que quieren ser parte de su compañía. Para el desarrollo de las empresas, hoy, la clave es que la gente quiera trabajar ahí.

Post Covid, los cambios en las modalidades de trabajo ya no son una novedad. Muchos equipos profesionales adoptaron dinámicas más flexibles e híbridas, que alternan entre presencialidad y home office. Pero, ¿es esto bueno o malo para el éxito? Esa es la pregunta que todos nos hacemos, intentemos pensar un poco la respuesta.

¿Es compatible el desarrollo de las empresas con las nuevas modalidades de trabajo?

Lo más importante es pensar los puntos a favor que tiene la implementación de metodologías de trabajo más ágiles, nuevos modelos y hasta nuevas tecnologías útiles en la selección de personal.

Cuando buscamos un nuevo trabajo hoy influye mucho las posibilidades de autonomía y flexibilización que ese puesto ofrece. Ya uno no evalúa solamente salarios, beneficios y condiciones, esas otras cuestiones son igual de importantes y las empresas se ven obligadas a considerarlas cuando van a contratar gente.

Aunque esto ya venía planteándose hace unos años y se pensaban ambientes de trabajo más relajados, donde se pudiera potenciar el rendimiento del equipo, la experiencia ganada en el trabajo remoto durante la pandemia aceleró mucho las cosas, obviamente. 

El mayor o menor desarrollo de las empresas que este nuevo campo de juego plantea se volvió un tema de debate, sobre todo cuando se escucha, por todas partes, que mucha gente que conocemos cambió de puesto o empezó a trabajar de forma remota y autoadministrada para afuera. Y que, además, está cobrando su salario en dólares.

Si pensamos, como se hace desde el mundo del marketing, en que el cliente debe ser nuestro foco de atención, entonces implementar estas nuevas ideas tiene sentido y hasta puede ser muy bueno para el crecimiento corporativo. 

¿Qué quiero decir con esto? Qué, tal cómo en una estrategia de Inbound Marketing tratamos de empatizar con nuestro público y brindarle una experiencia de cliente satisfactoria que lleve a resolver su dolor, a la hora de planificar las dinámicas de trabajo las empresas deben, igualmente, ponerse en el lugar de sus empleados y diseñar una experiencia de trabajo que dé lugar al crecimiento profesional y personal del equipo.

Hoy hay cosas que ya no podemos dejar de considerar, como es la inclusión y la diversidad. Hay un cambio en todo lo que es la cultura corporativa, que apunta a contener, acompañar y motivar a los que están trabajando dentro de esa empresa.

Un proyecto de trabajo atractivo, que haga que un empleado quiera quedarse y trabajar en nuestra empresa, es actualmente uno de los desafíos principales. Construir, como empresa, una imágen que se asocie con la oportunidad de crecimiento profesional en un contexto más humanizado es un objetivo que ya muchas corporaciones están poniendo sobre la mesa.

Mejorar, en definitiva, el concepto de marca empleadora, para que la gente quiera trabajar en la compañía. De eso se trata.

Pero, como todo, es a prueba y error. Hay que ver que cosas se van a adoptar de acá en adelante de forma definitiva. Sí queda claro que, en pos del desarrollo de las empresas, pensar todo esto ya no es solo una opción.

Lectura recomendada: Inbound Marketing: hacé que los clientes te vengan a buscar a vos.